Empezamos la visita en un molino de aceite para conocer el sistema de extracción de este alimento tan natural y poder degustarlo.
Tras el molino, nos fuimos a una tonelería donde uno de los chicos y una de las profesoras se atrevieron a montar un barril.
Y para finalizar la visita, nos desplazamos hasta una bodega para conocer la elaboración de los vinos de Montilla Moriles.
Fue una mañana muy agradable en la que estuvo presente la parte más artesana de la programación del viaje de estos chicos.
Esperamos que lo pasaran bien y nos vemos el próximo año!
Un saludo a Madame Polin (María) que es la que siempre los acompaña!
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